03/04/25
Por mis venas corre un cocktel de emoción por volver a ser peregrino, después de tanto tiempo, también una "nada" propia del no saber que esperar. No sé qué me deparará el Camino, qué planes tiene el universo, sólo me queda encomendarme a sus designios. Esta es la vida del caminante, la vida del superviviente, siempre en búsqueda de sus necesidades básicas, permitiendo así que, al mismo tiempo, como un proceso inconsciente y en 2º plano, se satisfagan y colmen también las necesidades más elevadas. Nuestro rosario es el Caminar, nuestra alfombra, la tierra misma. Dios, permite que la magia del Camino me penetre, q el silencio me inunde, amorosamente, y q los encuentros me deshagan.
05/04
Dios, qué fatiga más grande. Qué gozada más grande. Divino masoquismo el del peregrino. Me encuentro ahora mismo cumpliendo el hermoso proyecto de acampar. Mecido por el sonido de la lluvia. Super majas las hospitaleras de ayer en Grado, argentinas, q se conocieron en el Camino. Y los caminantes q conocí, María la rusa, Markus el suizo, también había una chica española, un sueco, un noruego, un francés... esta tarde comí en Salas en un restaurante un pedazo de menú d la hostia. Una sopa, un potaje de patatas con algo de costilla, y un 3er plato de carne, un buen filete, con patatas fritas, además de una deliciosas natillas.
Hoy he sentido cómo el caminar ha comenzado a centrifugar y limpiar mi mente.
12/04
Bueno ya terminó mi semanita de Camino, en verdad me ha resultado duro, por el terreno, por no tener pueblos con albergues intermedios, y por el peso que traje con la tienda. Acampé 3 noches, fue maravilloso el verme sólo frente a los elementos, con la concentración debida para la supervivencia. Aunque el dormir fue tarea difícil. Tomé el bus desde Fonsagrada a Lugo, pues ya iba muy justo para estar en Bercianos el 14. Aquí en Lugo volví a ver a Markus y María, fuimos a cenar anoche. También pasé un buen rato con David, el mexicano. Al estar lisiado, vino también a Lugo en bus.
